martes, 11 de diciembre de 2012

El ave en el nogal

Basado en un echo real. Me ocurrió cuando yo tenia cerca de 12 años. Recuerdo como si fuese ayer este acontecimiento que me marco, dejándome con una gran intriga, pues no logro comprender que pudo haber sido.


El ave en el nogal

Esa tarde, nos reunimos a jugar a la pelota en la casa de mi abuela.
Estábamos dos primos, un amigo, mi hermano y yo.
El sol ya había caído, y el cielo se oscurecía lentamente.
Cuando terminamos de jugar, nos recostamos sobre el césped a descansar un momento. Disfrutábamos aquella brisa deliciosa de verano, mientras los cinco mirábamos el firmamento que comenzaba a teñirse de un azul más pronunciado, debido a la noche que se aprontaba veloz.
De pronto, los cinco avistamos una estrella fugaz que cruzaba el espacio perpendicular a nuestra posición. Con eso, los deseos llovieron al instante, era un buen momento, y bastante mágico.
Al perder de vista el brillante objeto volador que de seguro se precipitaba en caída libre, el silencio maravilloso fue quebrantado por un ruido tétrico... El grito de un ave inmensa. Nos incorporamos sobre nuestras manos, despegando la espalda del pasto, y dirigimos nuestras pupilas curiosas hacia el punto de donde provenía el espeluznante ruido. Cuando logramos divisar que en el nogal de la izquierda, que estaba ubicado al fondo del terreno; una enorme criatura se movía entre sus hojas, como si estuviese acomodándose. De un segundo a otro, de entre las frondosas ramas, surgieron dos alas grandes, que con el temor solo logré percibir que tenían un color bastante oscuro. Los cinco corrimos hacia dentro de la casa y cuando mencionamos lo ocurrido, no nos creyeron.
Cuando volvimos a salir al patio, el extraño animal ya no estaba. Se había esfumado con nuestro temor momentáneo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario